Y de un libro de tapas duras y hojas muy finitas, hojeo, por si la suerte viniese con el viento del paso de las hojas, y encontrase el significado justo. ¿Cómo era la palabra que me dijiste? No la recuerdo. Pero sé que transito sobre un puente que me la recuerda, y con la alegría de no temerle a recordar.
Y encontré la risa sin darme cuenta, mientras despertaba de la siesta de miedos. ¿Y tuve? ¿Qué tuve? Mucho miedo, diría yo. Otras cosas, dirían otros. Y otras cosas, si encontrase la palabra.
Y si robases pastito de mi jardín, dejaría un huequito para pasar mis manos cuando duermas, y viceversa.
Y ya sé donde encontrarte. Y no confundamos palabras con momentos.
Hubo un momento en el que te encontré. Y aún no sé la palabra.
Ceci
febrero '07
No hay comentarios.:
Publicar un comentario