Te he visto,
paramnesia de tus ojos que me miran;
incrustadas luces de fuego vestidas de un hombre sin nombre.
Te he visto,
paramnesia del deseo, náufrago en la multitud.
Y así rememoro como era aquello,
el aire que se distingue de la rutina,
sospechoso de mi dicha al recordar.
Te he visto,
y de un precipicio llega a mis pies la dimensión de compartir.
Te he visto,
déjà vu cuando te hablo en francés.
Y me dan ganas de acomodar tu camisa,
de responderte con una sonrisa y darte cambio para el metro.
Te he visto,
Y recuerdo que me gusta
Y esto es lo que quiero.
Universo de la inclusión.
Digo sí, porque hoy te he visto.
Paramnesia de mis días,
que se enamoran de tu cuello,
de la forma de tus labios al concluir las ideas que me dices,
de los gestos con tus manos tan únicas,
fundidas en mi alma,
que veo en un hombre sin nombre,
al cruzar una calle cualquiera.
ceci
como de costumbre: recién salido del horno,
dic.2008
1 comentario:
Lo has visto.
qué será de ese hombre sin nombre si se entera que enteras las esas letras tuyas son suyas?
merece saberse sabido.
como siempre, un honor leer.-
lleo
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